viernes, 15 de enero de 2010

Arte Románico

El arte románico comienza en el siglo XI, a partir de la abadía de Cluny. Se difunde por las peregrinaciones y llega hasta el siglo XII. Es un arte didáctico que pretende la educación religiosa del pueblo. La arquitectura es el arte por excelencia, a la que se subordinan todas las demás. El país relacionado con el románico por autonomasia es Francia, aunque también tuvieron su participación Inglaterra, Escocia, Borgoña y la mitad norte de España. Italia, centro de la vida papal y por lo tanto opuesta a la unificación religiosa de todo el continente, recibió de forma más indirecta este estilo artístico, aunque fue el país con el románico más puro debido a su pasado como centro del Imperio Romano. ARQUITECTURA ROMÁNICA Los materiales utilizados para la construcción eran piedra de sillería y sillares.Las Plantas eran basilicales de tres o cinco naves (forma rectangular), que tenián influencia romana y de cruz latina que tenia la nave transversal llamada transepto.Donde se cruza la nave central y el transepto, se llama crucero. EL templo debía estar bovedado. Éstas bóvedas podían ser:
* Bóvedas de cañón, reforzada a veces y dividida en tramos por arcos fajones (como soporte)

* Bóvedas de arista(cruce transversal de dos bóvedas de cañón).
* Bóvedas de cuarto de esfera para los
ábsides.
Esas enormes bóvedas ejercían una fuerza no sólo vertical sino transversal que tenía que ser contrarrestada con otras naves laterales o la presencia en el exterior de los muros de poderosos y macizos contrafuertes. No siempre se hizo con acierto, como sabemos por innumerables derrumbamientos producidos en diferentes épocas.
El muro románico: El muro consta de un núcleo formado por ripios consolidados con mortero de cal y sendos acabados exteriores. El muro románico es de gran espesor. Mas de un metro. En el constructor de esa época primaba la estabilidad de la obra sobre cualquier otra circunstancia. Y creaba muros de gran potencia, con escasos vanos por miedo a debilitarlos. Los muros están formados de sillarejo o de sillares desiguales con poca regularidad en las hiladas.


Los contrafuertes:
Los soportes característicos de un edificio románico son el pilar compuesto y el estribo o contrafuerte adherido exteriormente al muro. Los contrafuertes tienen por objeto reforzar los muros y servir a la vez de estribo o contrarresto a los arcos y bóvedas (servicio que también prestan los pilares compuestos): son visibles al exterior, lisos y de forma prismática. Pero cuando se adhieren a los ábsides aparecen frecuentemente a modo de columnas que sostienen el alero.

Arco de medio punto: Es el utilizado en la arquitectura románica, el de medio punto (semicircular) y de sección rectangular, enriqueciéndolo en su intradós (superficie interior) con uno más estrecho, decorando sus ángulos con dos molduras (saliente con perfil uniforme) de sección semicircular
.Las puertas se hallan formadas por una serie de arcos redondos concéntricos y en degradación apoyados en sendas columnillas de suerte que todo el conjunto forma una especie de arco abocinado y moldurado contribuyendo al mayor efecto visual el mismo grosor del muro que suele formar allí un cuerpo saliente.
Las ventanas se abren casi siempre en la fachada y en el ábside y algunas veces en los muros laterales. Son bastante más altas que anchas y terminan por arriba en arco doble, generalmente plano o de arista viva apoyado sobre columnitas como las de la portada y cuando estos arcos se rodean de molduras finas o baquetones o bien las ventanas han dejado la primitiva estrechez, pertenecen a la segunda época del estilo. Posteriormente, se fue ensayando y generalizando el uso de grandes vidrieras.

Edificios románicos emblemáticos en Italia:
Catedral de Trento



San Ambrosio de Milán
Se construyó a principios del siglo XI sobre una basílica anterior de la que sólo se conserva la Torre de los Monjes, que data de finales del siglo X.







Abadía de Pomposa

Era una abadía cluniacense. Su iglesia tenía tres naves, divididas por columnas de estilo muy clásico.











Escultura Románica:
1. Antinaturalismo: desconexión de lo representado con el mundo real. Carácter simbólico y alegórico. Se busca a expresión del contenido religioso.
2. Las figuras se deforman intencionadamente buscando el impacto emocional.
3. Simplicidad y estilización. Ge
ometrismo y abstracción.
4. Rehusa la representación del cuerpo humano desnudo, todas las figuras se cubren con vestiduras. No hay canon de proporcionalidad, ni equilibrio entre masa y peso.
5. Las figuras son rígidas, hieráticas. Solemnes y alargadas, para acentuar su carácter espiritual. Técnicamente aparecen como primitivas, con un cierto aire arcaico.
6. Ausencia general de movimiento.
7. Las composiciones y escenas se yuxtaponen en un mismo plano, sin formar grupos.
8. Falta volumen, las composiciones son planas y simétricas, con un claro predominio de la frontalidad.
9. Es una plástica que se dirige a la mente, de una gran carga intelectual, dado que transmite contenidos ideográficos con una evidente afán didáctico.

Pintura Románica:
Predominan la simetría y la composición yuxtapuesta. Los temas plasmados en las pinturas coinciden también con los de la escultura, aunque hay mayor predominio de la figura humana y, en general, de las escenas bíblicas. La técnica utilizada es el fresco para la pintura mural de los interiores de las iglesias y ábsides, también adaptándose al marco arquitectónico; y el temple para decorar los frontales del altar.
Existe un fuerte expresionismo sin mezcla de colores y con influencia mozárabe. Se le daba gran importancia al dibujo y muy poca a la luz y al modelado.
En Europa se pueden distinguir dos escuelas: una de tradición carolingia, predominante en el norte, y otra de tradición bizantina predominante en el resto del continente, pero también hay numerosas escuelas autóctonas.